Hoy os mostramos un restaurante de la cadena Mishoom situado en un antiguo almacén muy cercano a la estación ferroviaria de King's Cross en Londres. Un restaurante que nos hace imaginarnos el Bombay de mediados del siglo 20.
El espacio se divide en una serie de niveles que crean más de 850 metros cuadrados de espacio de comedor, con capacidad para 250 comensales.
El ladrillo original se ha mantenido siempre que ha sido posible, con la excepción de algunos muros que fueron pintados de blanco. Se agregó una entreplanta de acero para crear más superficie, manteniendo la gran altura y las vistas de la cubierta, y para crear zonas de comedor más privadas.
Los propietarios y los diseñadores se embarcaron en dos viajes a la India para encontrar inspiración. De estos viajes trajeron varios productos entre los que se encuentran un lavabo de porcelana, separadores de ambientes y varias escaleras. Además, se creó una réplica del reloj que cuelga en la estación de Victoria de Londres.
Sin duda, un lugar alucinante para tomarse un Brunch en Londres.
